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Nuestras queridas y alicaídas Águilas sucumbieron 2-0 en el Azteca contra el campeón Atlas en cotejo que fue pan con lo mismo al igual que los últimos meses. La novedad es que la suerte nos abandonó y se fue a apoyar a un mejor equipo. Se terminó el maquillaje y este rostro impresentable es la realidad del equipo.
Para esta charla, hagamos una fogata y sentémonos todos en círculo frente a ella puesto que somos hermanos y hermanas del mismo dolor y tenemos que seguir hablando de esta crisis en la que estamos sumergidos.
Alguien levantará la mano y dirá que para variar, estamos exagerando por dos partidos y sin refuerzos. Si fuera el caso, estaríamos todos de acuerdo, pero la realidad es que la última victoria azulcrema fue en octubre 23 del año pasado. Este equipo se murió desde la derrota ante Rayados por Concachampions.
Atlas fue el séptimo cotejo en fila en el que el triunfo brilló por su ausencia y el panorama luce poco optimista. Salvo que Diego Valdés sea un mago de tintes legendarios y Jorge Meré sea una reencarnación de Paolo Maldini, el América presenta pocos argumentos para ser protagonista en el torneo.
Del plantel hemos hablado hasta el cansancio. Si nos trajeran 22 jugadores nuevos, nadie se opondría. Y es que el América no presenta apatía ni falta de voluntad en la cancha. Se ve que casi todos ellos se dejan lo mejor que tienen. El problema está por otro lado y el único que se rehusa a verlo es Baños. Esta plantilla tiene el pequeño gran problema de que carece de calidad. La mayoría son medianitos y adicional, tienen poco carácter como para que alguno quiera echarse el equipo al hombro.
Otro tema que deberíamos tocar como familia azulcrema aquí reunida, es la necedad de Santiago Solari con la misma formación que mantiene desde el día uno. Si sus muchachos no están para jugar abiertos por las bandas porque no brindan la profundidad que pretende, ¿por qué insistir? Si sus muchachos no son jugadores verticales porque son latinos y de este lado del mundo se juega más al toquecito, ¿por qué insistir? Como prueba fue genial, pero tras un año en el banquillo sigue apostando por algo que nunca le van a dar.
Alguien de nosotros murmurará: pero si con esa formación se logró ser mejor en puntos, ¿no tendríamos que replantearnos el enfoque sobre la formación que sí funciona? El argumento sería: funciona para carreras largas, para sumar puntos, pero en eliminatorias directas no existe. Las dos derrotas en cuartos de final y la Concachampions perdida muestra que bajo algunos escenarios puede funcionar, pero en México se ganan títulos mediante duelos directos.
En todos los años que he tenido la fortuna de ver fútbol, he visto todo tipo de entrenadores, incluyendo a esos que se mueren con la suya y por lo general, nunca termina bien. Insistir con esquema táctico que no da resultados es dispararse al pie una y otra vez.
Es probable que alguien del círculo levante la mano y diga: ¿pero es que de qué forma pudiera jugar si ni tiene plantel ni buenos jugadores? Pues esa la cuestión: hay que rotar, probar y experimentar de tal manera que quede claro que está haciendo lo que puede en lugar de ser etiquetado como un necio que no quiere jugar de otra manera.
Solari está en arenas movedizas. Su plantel es voluntarioso pero falto de calidad con el plus de la incapacidad directiva para traer un refuerzo decente, sin embargo, se está saboteando a él mismo con sus decisiones tácticas. No es que se pretenda saber más de fútbol que él, pero si nos apegamos al sentido común, estaremos de acuerdo en que dos o tres experimentos caerían fantásticos. De continuar con la necedad, ninguna soga tendrá la fuerza suficiente para sacarle de ahí por larga que sea.
¿Pero qué pasa con el arbitraje? — exclama otro del grupo. Es una situación que nos tiene hartos a todos y que incluso ya hizo explotar a Solari. La expulsión de Roger por fecha uno fue típica de liga bananera. La de Viñas la hicieron parecer una entrada estilo hondureño cuando fue un accidente, pero claro, se empecinan en verla en cámara lenta y ahí todo se convierte en transmisiones del infierno donde los demonios quedan expuestos ante los ojos de todos.
Es cansino que el América siga siendo el equipo más perjudicado del fútbol mexicano y que el mundo siga como si nada. Lo mejor que ha dicho Solari desde que está en México, es decir en micrófonos que los árbitros pitan condicionados por la leyenda urbana de que suelen ayudarnos y como ninguno quiere ser etiquetado de amigo azulcrema, prefieren fallar y perjudicar porque nadie les cuestionará.
¿Entonces qué hacemos? ¿Estamos condenados? ¿Quién tiene la culpa? — preguntan airadamente algunas voces.
Al final, querida comunidad azulcrema, lo que ocurre tiene su origen en un dueño pasivo que tiene mil prioridades antes que su equipo. Podemos desgastarnos culpando sólo a Baños, a Solari, al plantel, pero como platicamos en Señalemos a los Culpables Correctos, el mal del América es estructural. Basta de pensar que se arregla todo trayendo al extremo derecho. Los juicios simples no tienen cabida en esta crisis azulcrema.
Nuestros males se solucionarán en cuanto se reformen los cimientos del Club. Pretender que un par de jugadores nos sacarán del fango es tapar el sol con un dedo. Hagamos nuestra parte y no quitemos el dedo del renglón sobre aquel que tiene el poder para cambiar esto y no lo hace.
Parafraseando al Joker de Joaquín Phoenix: Estamos en crisis y estoy harto de pretender que no.
ESTADÍSTICAS
El Momentum Attack (la gráfica aquí debajo) ratifica el hecho de que el América es un equipo con buena voluntad que juega a tope de sus posibilidades. El problema es la falta de calidad. Se tuvo el balón todo el partido y fueron incapaces de marcarle gol a Camilo Vargas. Atlas (en azul) no lo tuvo mas que apenas algunos instantes, pero clavaron dos goles lapidarios.
TITULARES
GUILLERMO OCHOA
Atlas llegó dos veces y ambas terminaron dentro. No tuvo responsabilidad en los goles.
JORGE SÁNCHEZ
Partido desastroso. Contó 24 pérdidas de balón, en duelos perdió casi todos por abajo y nunca fue opción real por derecha. Siempre atrabancado y haciendo honor a su apodo de Pata de Palo.
SEBASTIÁN CÁCERES
Mamita querida, cómo nos han visto la cara los uruguashos con sus joshas. Cáceres sigue siendo un cheque al portador. Fatal manera de entregarse contra un tipo que tenía 30 segundos en la cancha. ¿No se pudo ir en paquete con Tía Ema?
JORDAN SILVA
Por arriba es una torre. Raro que pierda algún duelo. Se afianza como nuestro defensor más fiable y será una patada en partes nobles si Solari le quita el lugar para poner a Meré.
LUIS FUENTES
Atlas no atacó así que fue un duelo sencillo. Correcto en casi todos los pases a compañeros aunque se echó en falta el no haber ayudado a la ofensiva como ha hecho en otras ocasiones. Sin embargo, mandó un gran cabezazo que Vargas le manoteó cuando se cantaba el primero y que pudo cambiar el rumbo del partido (87′).
PEDRO AQUINO
Ha mejorado en el apartado de pérdida de posesión. En este cotejo intentó estar por doquier pero le costó en los mano a mano ganando la mitad de sus duelos tantos por aire como por tierra. Lo que empieza a cansar es que no dispare de media distancia cuando cruza a terreno enemigo. (87′)
RICHARD SÁNCHEZ
La flojera hecha jugador. Un disparito de media distancia y navegar en la indiferencia fue su grandioso aporte. Si ya está harto del América, que pida su transferencia, todavía está a tiempo. (83′)
ALEX ZENDEJAS
Debut decente. Intentó moverse por derecha aunque es zurdo, así que tiene vocación natural de ir hacia dentro como hacía Leíto Suárez por lo que tampoco sirve para lo que pretende Solari. Aunque claro, si algún día llega ese extremo derecho, seguro que pasará a la izquierda para competir contra el Correcaminos Lainez. Pronto se dará cuenta de que tendrá que arrastrar más el balón y buscar menos a sus compañeros buenos para nada.
ÁLVARO FIDALGO
Hay que traerle amigos cada semana. Pareciera que la presencia de Meré le motivó para dar un partido aceptable en el que estuvo recorriendo el segundo tercio de la cancha buscando opciones. Le sigue faltando determinación en zona de gol, pero al menos ya no deambuló por la cancha. Veremos cuánto dura el encanto.
SALVADOR REYES
Chavita parece una locomotora que va, va y va. El problema es que es a veces algo atrabancado y no siempre elige de manera correcta. La ventaja es que a diferencia de otros, siempre termina las jugadas más allá de elegir a veces el camino complicado. Como sea, sigue siendo el único que da esbozos de poder dañar al rival.
HENRY MARTÍN
El América debería jugar sin delantero. Henry siempre buscó pelotazos que terminaron en falta dado que es un imán de empujones por la espalda. Cero tiros, cero chances creadas, cero todo, pero es que tampoco el balón le llega a modo (65′).
SUSTITUCIONES
FEDERICO VIÑAS
Expulsión ridícula. Sigue mal y de malas la joshita uruguasha. Pero eso sí, el tipo anda divo y que sólo sale a Europa cuando lleva doscientos años sin hacer algún gol relevante. Su malaria comenzó en un duelo vs Atlas donde se comió dos claras. Contra Atlas sucedió lo de la alineación indebida y ahora ve la roja. Contra los Rojinegros hay que mandarlo de vacaciones a Uruguay de ahora en adelante (65′ y expulsado 78′).
MIGUEL LAYÚN
Ni fú ni fá (83′).
KAREL CAMPOS
Ni fú ni fá (87′).
JONATHAN DOS SANTOS
Ni fú ni fá (87′).
COMENTARIO FINAL
Menos mal que viene fecha FIFA porque ni ganas de perder el tiempo con este equipo que lo único que transmite es lástima.
Sin embargo, es curioso. Hace unos pocos meses donde todo era miel y hojuelas con eso del frío en la cima, el tal Miguelito Herrera habloteaba sobre que él armó al plantel y no se qué. Curioso que de ese plantel armado por él, nueve se han ido al demonio por horribles jugadores.
Mucha de la basura que tenemos en Coapa es porque tanto él como Baños se han cansado de traer jugadores buenos para nada, que cobran mucho y hacen poco. Al dueño le ha importado un demonio porque todo ha sido maquillado por esos puntitos de temporada regular.
Lo que me fascina de las máscaras es que eventualmente se rompen. El América es una porquería de equipo y aunque Solari me aburra con su necedad, la realidad es que el tipo ha intentado construir algo usando fango de pantano. De esto, la responsabilidad absoluta recae en Baños y el dueño.
Y si eres de los que pide a Solari que renuncie “por dignidad”, te cuento que el mundo no funciona así. En la teoría suena muy bonito el héroe que deja todo por seguir sus ideales, pensando que ese golpe de timón va a cambiar todo, que abrirá los ojos al mundo y verán lo equivocados que han estado mientras el pobre héroe cae como mártir, pero con la razón tatuada en el pecho.
En el mundo real hay demasiados egos. Si Solari renuncia, no va a pasar nada. Baños seguirá en su puesto, continuarán los fichajes de medio pelo, seguirá el dueño pasivo y nada cambiará.
Podemos traer mañana mismo a otro entrenador y ya conocemos la historia: los muchachos se motivan, juegan bien 3 fechas, se revienta a Solari, que realmente él era el malo hasta que la realidad nos vuelva a alcanzar.
Al América le urge una reestructura a nivel directivo que pueda permear las directrices correctas a los que van al campo. Mientras el dueño siga apostando por la beca de Santiago Baños, estamos no jodidos, más bien, mega jodidos.
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