“El Más Grande”

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Después de leer tan inaudito “gracias, afición” cada semestre, años de frustraciones y sueños rotos, hoy por fin el América ha logrado el tan ansiado título, me llena de alegría escribir esto mientras todos los aficionados Azulcremas se encuentren celebrando este campeonato, solamente quiero decirles que sigamos festejando porque nos tragamos años decisiones erróneas de directivos, de técnicos timoratos y de jugadores saboteando todo en jugadas específicas, por fin se acabó esto y podemos decir que el América es campeón.

América termina un torneo que inició con un descalabro inesperado contra Juárez FC, que mostraba muchas dudas y experimentos raros con André Jardine, que fracasó en la Leagues Cup y que por momentos se observaba a un cuadro genérico que apenas sabía ganar pero sin convencer a nadie. 

De pronto las cosas empezaron a mejorar, se vio a un cuadro muy competitivo y demostraba estar por encima de otras plantillas del fútbol mexicano, con jugadores que tomaron turnos para brillar de manera individual como Diego Valdés durante el ecuador del torneo regular y Henry Martín en la recta final del torneo. Las águilas terminaron en primer lugar con 40 puntos, 12 victorias, 4 empates y una sola derrota, se ganó los tres clásicos, se vapuleó a Monterrey en su estadio y contra Tigres se mostró cauto, pero firmaron un buen empate de visita.

Como todos sabemos la liguilla era el “coco” del América, no por el nivel de los rivales sino por los clásicos autosabotajes, esas jugadas inéditas que tiraban todo por la borda, pero en esta ocasión vinos a un América seguro de sí mismo, cuando se fue abajo en el marcador contra León en la ida de los cuartos el equipo no se desesperó, sacó el empate y resolvió en la vuelta, cuando perdieron en la vuelta de las semifinales contra San Luis y recibieron críticas por todos lados e incluso de su gente, pero el equipo entendió que todo debía resolverse en la final.

Tigres fue un rival duro, complicado y por lapsos fue mejor que las Águilas; sin embargo, cuando la situación era riesgosa apareció Luis Malagón con sus atajadas, para mí el héroe de esta serie y de la liguilla, y de ahí el equipo Azulcrema aprovechó los despistes y errores del rival para ganar el partido por un marcador de 3-0 y coronarse frente a su gente. 

Sorpresivamente, la directiva que tanto fue criticada y con razón por fin confeccionó un buen plantel, tardaron años de malos fichajes, pero por fin reunió a jugadores de gran nivel con un técnico brillante, el título es el reflejo de un excelente trabajo en todas las áreas y de entender que estar en América es ser exigente en todos los partidos, si se pierde se tiene que aprender de los errores, si se empata se tiene que examinar que faltó para ganar y si se gana se tiene repetir al siguiente partido.

Hoy por fin somos campeones nuevamente y hay que celebrarlo, pero no hay que detenernos aquí porque mañana se tiene que planear el siguiente torneo para buscar el bicampeonato y el título de Concacaf, se necesitan refuerzos en posiciones específicas y sobre todo mantener el nivel de exigencia, finalmente una felicitación a todo el plantel, directiva, cuerpo técnico y trabajadores del club por demostrar una vez más que el América es el equipo más grande del fútbol mexicano. Que esta afición se sienta orgulloso de decirlo en cada oportunidad que tengan, ahora escríbelo, grítalo y repítelo: EL AMÉRICA ES CAMPEÓN.

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“Un amistoso extraño”