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El América firma un fracaso al quedar eliminado de CONCACAF y con ello se cierra su oportunidad de alcanzar el Nuevo Mundial de Clubes de 2025, en opinión personal una derrota catastrófica de cara al futuro.
América no logró vencer a sus demonios y una vez más cayó frente al Pachuca reviviendo el término de “Papáchuca”; mientras jugadores, cuerpo técnico y aficionados se encuentren analizando las causas de la derrota, aquí hablaremos futuro sobre las consecuencias de este descalabro y lo separamos en corto, mediano y largo plazo.
Corto plazo
América juega peor cada día, la falta de pretemporada afecta mucho al plantel y además su juego se ha visto muy limitado contra Pumas, Pachuca en la ida y contra Puebla, a pesar de que se ganó este último juego con rotación del plantel era evidente que jugadores como Diego Valdés, Julián Quiñones y Henry Martín se mostraban agotados. El día de ayer Pachuca corrió más, golpeó primero y aguantó el resultado ante un América incapaz de generar peligro.
Desconozco por qué Jardine sacó a Zendejas que era su mejor elemento, pero si la explicación fue que estaba cansado estamos ante un problema serio de cara a la liguilla, el plantel está mermado físicamente y sin mayores ideas que mandar mil centros sin ninguna posibilidad de remate, esperemos que el cuerpo técnico presente una solución con una semana de trabajo, porque hay rivales que se ven mejor y tienen muchas ganas de ganarles a las Águilas.
Mediano plazo
América necesitará una reforma en su plantel, y la primera piedra inicia con Henry Martín ¿renovará o se irá? ¿Por qué tarda tanto esta situación? ¿No se confía en el delantero? Después se tiene que definir la situación de Álvaro Fidalgo y Sebastián Cáceres que amagan cada torneo con irse a Europa.
Se necesita evaluar la situación de Kevin Álvarez y Brian Rodríguez, jugadores que han quedado muy lejos de las expectativas, y pensar que hacer con Fuentes, Lara, Naveda, Araujo, Sánchez, Illian Hernández e Igor Lichnovsky (de buen rendimiento, pero con distracciones muy severas fuera del campo).
La directiva necesita pensar muy bien en el armado del plantel para el próximo torneo y buscar revancha en Concacaf.
Largo plazo
El más doloroso sin duda, al no poder participar en el nuevo formato del Mundial de Clubes, América se priva de la posibilidad de llevarse entre 40 y 50 millones de dólares, cifra que se les da a los participantes del mundial según reportan diferentes medios deportivos, además a esa cifra le tendríamos que añadir menor visibilidad de marca al no poder jugar y se traduce en menores ganancias futuras por patrocinios, playeras y méritos deportivos.
Lo peor del asunto radica en que planteles como Monterrey, León y tal vez Pachuca recibirán esa inyección económica por su participación en el mundial y de ahí podrán armar mejores planteles para competir por la liga, América verá como sus rivales se fortalecerán en un futuro y será más difícil obtener el título.
¿Cómo Azcárraga tomó la noticia de que su equipo se privó de ganancias por cincuenta millones de dólares?
¿Qué hará al respecto?
¿Qué tiene que decir Santiago Baños sobre este fracaso deportivo y económico?
Conclusión
Acabamos de presenciar un desastre monumental en términos económicos y deportivos, el club más exitoso de México no participará en la primera edición de un certamen que promete ganancias, prestigio internacional y competencia al máximo nivel.
Es tarea de Jardine y los jugadores de asimilar lo antes posible el fracaso y prepararse para la liguilla, que por cierto, pinta mal para el América porque no está jugando bien y parece que sus jugadores no entienden la situación actual, Valdés menciona que no es fracaso, pero Fidalgo lo contradice y afirma que sí lo es, pero añade que no debe afectarles en la liguilla ¿Le creemos aún?
La afición puede minimizar lo que pasó hoy y decir que con la obtención del bicampeonato todo quedará arreglado, en opinión personal, aunque el equipo logre la hazaña de convertirse en campeón el daño ya está hecho, si América fuera un barco de guerra diríamos que ayer recibió un torpedo que reventó la sala de máquinas y se ha quedado inmóvil, el capitán deberá actuar rápido antes de que otro torpedo enemigo lo alcance.
Por ahora, su barco está en llamas y entra mucha agua.
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