No te pierdas más reciente capitulazo del NidoPodcast, el show semanal para Americanistas Exigentes.
América continuó el Tour del Papelón 2017 y se presentó en la cancha del sotanero León que mantuvo el empate (1-1) tras jugar setenta minutos con un jugador menos. El resultado fue costoso. Perdimos dos puntos, perdimos a Ibarra y casi hemos perdido la esperanza en este torneo.
Hablar de las Águilas resulta tedioso. En otras oportunidades hemos señalado que la situación actual es la suma de malas decisiones en todos los niveles en los últimos 18 meses cuando menos.
Encima tenemos doble mala suerte. Entre el karma que se ha cobrado las decisiones de Peláez mas la vibra de La Volpe nos han quitado a Cecilio (que ya reaparecerá tras la luxación de hombro) y a Renato (baja confirmada de 3 meses por fractura de peroné). Es difícil encontrar una explicación cuando los únicos dos relevantes hacia el frente se lesionan de mala manera.
Y hablando de atacantes, no te sorprenda si de pronto baja la temperatura en tu ciudad. El hielo que emana del pecho de los volantes y delanteros (con la excepción de los lesionados) empieza a tomar forma de iceberg. No le hacen gol a nadie. Entre bicicletas prolongadas que pierden la cadena, un par de atrabancados que no le hacen gol ni al arcoiris y un científico que prendió fuego a sus fórmulas, estamos desarmados.
Los defensores de este proyecto (algún sector de la afición y la Directiva) dirán que se hace tormenta en un vaso de agua. La primera justificación será en que como Tigres, León y Necaxa (los últimos semifinalistas) están mal, tampoco debe sorprender que lo estemos por “el poco tiempo de preparación” y demás excusas.
Mal de muchos, consuelo de tontos. Nunca un refrán fue tan cierto.
También dirán que la “poca fortuna” nos ha acompañado, pues se han llevado a Edson que marca diferencia, Cecilio empezaba a adaptarse y se lesionó. Y el único con desborde y centro se pierde el resto del torneo. Es cierto, pero también es cierto que voltear a la banca y animarse a elegir sustitutos es para valientes. La diferencia entre los claramente titulares y suplentes es abismal.
América debería tener un plantel con sustitutos de calidad 7 como mínimo para que sustituir a un 8 o 9 sea menos dramático. Pero mejor culpemos a la mala suerte, es fácil y más barato.
Si bien no estamos eliminados matemáticamente, la esperanza de ganar dos partidos seguidos y obtener impulso estará hasta el final de temporada. Pinta difícil. Tras 9 fechas no se ve por dónde venga esa mágica reacción.
La única esperanza es que Cecilio regrese cuanto antes y cargue con el peso del equipo. Si no, solo estaremos prolongando nuestra agonía mediante ilusiones vacías del tipo “ojalá clasifiquemos aunque sea como octavo, la liguilla es otro torneo”.
La liguilla es otro torneo si vas a presentar argumentos no vistos en la temporada regular y este América no parece tener as alguno bajo la manga.
PRIMER TIEMPO
“Nacho” González conectó de cabeza al 8′ y sacudió el travesaño.
Al 19′ vino un cambio. Se fue Renato en camilla y entró Darwin. La dura barrida por detrás del viejo conocido –y desleal– Andrés “Rifle” Andrade dejó tendido al ecuatoriano.
La repetición no dejó dudas. Es jugada de expulsión pero no para el árbitro. Sin embargo, pareció que la duda permaneció en su mente, pues a la siguiente echó a Pereyra tras pisotón a Samudio.
Quedó la impresión de que los tres puntos eran cuestión de tiempo. Un hombre extra con setenta minutos por jugar ante el último lugar no se tiene todos los días.
Sin embargo, la realidad nos azotó como un fuerte viento que se cuela tras abrir la ventana. León fue mejor, León llegó por las bandas, León se puso arriba con gol de Boselli de quien somos hijos absolutos.
De manera ya no tan increíble –que de América ya no sorprende nada–, fuimos al descanso con desventaja en el marcador.
SEGUNDO TIEMPO
Se fue Chepe y entró Lainez como centrocampista un poco cargado por izquierda pero no tanto evitar estorbarse con Arroyo.
Y como nuestro par de nueves son incapaces de hacer un remate que complique un poquito a Yarbrough, tuvo que ser el paraguayo Valdez quien por aire ganó el centro de Darwin y puso la igualdad en el marcador al 47′. El defensor se convirtió en el segundo mejor goleador del equipo con dos tantos.
Pareció –ahora sí– que se le daba la vuelta en cualquier momento. Especialmente al 53′ tras gran conducción de Lainez que tocó para Romero quien voló su remate.
Narrar los doscientos estériles intentos por conseguir la ventaja es perder el tiempo.
Mejor enfocarnos en Lainez quien siguió demostrando que tiene calidad y más sangre que los demás. Sin embargo, no deja de sentirse extraño verle en la cancha. Parece un niño colándose a una reunión de adultos. Esperemos no se encuentre con algún Andrade que busque reventarle bajo el pretexto de a mi ningún chaval me va a pintar la cara.
Y al final, uno-uno. Si en este escenario no pudimos conseguir los tres puntos, ¿en cual podremos hacerlo? ¿Contra Pachuca? ¿Contra Chivas? ¿Contra Tijuana? ¿Contra Monterrey? ¿Contra quién?
ESTADÍSTICAS
RENDIMIEINTO
AGUSTÍN MARCHESÍN
Ni el escapa a la maldición de Boselli. No voló demasiado pero durante el primer tiempo estuvo atento para cortar algunos balones al área.
BRUNO VALDEZ
Garra paraguaya. Sí, que perdió el salto (junto a Goltz) que derivó en gol en contra. Pero es uno que no se rinde nunca y que tiene no un martillo, si no un mazo en la frente cuando se trata de ganar en el área rival. Marcó el tanto del empate y confirmó que nunca jamás en la vida debe ser un “sacrificado del 10/8”. Nunca.
PAOLO GOLTZ
Quizá faltó algo de coordinación con Bruno para que uno se quedara junto a Mauro en lugar de ir ambos a interceptar el centro. Estuvo atento con las anticipaciones hasta antes del gol. En el segundo tiempo fue casi espectador que León se replegó y causó menos peligro.
PABLO AGUILAR
Otro que demuestra corazón. Lástima que sea defensor y no atacante que se cansó de ganar por aire en territorio enemigo. Parece que compite con Bruno para ver quién lo hace mejor. Ojalá pudieran dar un poco de ADN a esos de arriba.
MIGUEL SAMUDIO
Quizá su mejor aporte fue el tener que soportar el pisotón de Pereyra que ayudó a jugar contra 10 por 70 minutos. Del resto, una noche algo intrascendente porque León no llegó después del gol.
DANIEL GUERRERO
Nada nuevo en el accionar. No se replegó hacia atrás como otras veces pero le falta intensidad para presionar a los rivales. Un contención no puede terminar un partido con el uniforme limpiecito.
WILLIAM DA SILVA
Mucho despliegue físico que sirve de poco cuando se utiliza para perseguir rivales. Como siempre, es el único que prueba de media distancia aunque también hay que decir que rara vez van a portería. Es una tristeza que el William de liguilla haya sido un mes de inspiración que difícilmente volverá.
RENATO IBARRA
Solo queda darle ánimos para que se recupere y vuelva mejor que nunca. Intentando ser positivos, la fractura fue en la izquierda por lo que la derecha que es la de conducción y centro permanece intacta. #FuerzaRenato
MICHAEL ARROYO
Lo intentó, sí. El problema es que abusó de su famosa bicicleta. ¿Cuántas jodidas veces más hemos de decir que cuando hace uno o dos pedaleos y saca el remate es mas peligroso que cuando lo hace veinte veces?
SILVIO ROMERO
¿En qué momento se convirtió en Oribe 2? El balón le rebota, los remates van a las nubes y sencillamente no encuentra como rematar entre los tres postes.
ORIBE PERALTA
De dos no se hace uno. Doble ración de atrabancados y peleados con el gol. El problema es que luego hace un gol de vez en cuando y resulta que los “detractores” (que solo buscamos el bienestar del equipo) somos los villanos cuando claramente América necesita un centro delantero letal y no uno que solo luche.
SUSTITUCIONES
DARWIN QUINTERO
Mandó el centro que terminó en remate de Bruno. Eso fue al comienzo del segundo tiempo. El resto del partido no se le volvió a ver de manera importante. Tampoco es que lo esperásemos, la verdad.
DIEGO LAINEZ
Dio frescura al medio. Su cualidad más importante hasta ahora, es que siempre conduce con la vista levantada. Eso ayuda a ubicar y servir de forma precisa a los compañeros. Quizá ni valga la pena hacerse muchas ilusiones con él que en cuanto el Porto o Dortmund se enteren, se lo van a llevar.
CARLOS ROSEL
¿Algún día volverá a hacer algo relevante? Es cierto que en diez minutos tampoco se puede salvar el mundo, pero hombre, pídela, encara, haz algo para darte a notar. Ir a la banda a esconderse no tiene mucho mérito.
LÍNEA POR LÍNEA
Si disfrutas del contenido que hacemos, considera invitar un cafecito a tus amigos de NidoAzulcrema.
O si prefieres, puedes dar una propina.
