No te pierdas más reciente capitulazo del NidoPodcast, el show semanal para Americanistas Exigentes.
La realidad alcanzó a ese equipillo conocido como “Guadalajara”. Solo una dosis extrema de autosabotaje hubiera podido privar al América de plantarse en su segunda final consecutiva y no fue así.
Las Águilas se bebieron su fútbol champagne hace un mes y lo canjearon por fútbol pulque: más barato, más popular, más feo de pasar por el gaznate, pero igual de embriagante y efectivo.
A diferencia del patinaje artístico en donde la estética tiene alto valor para definir al vencedor, el vulgar fútbol solo requiere que la pelota pase entre los tres palos, como sea, para que un equipo se salga con la suya.
La aparición del fútbol pulque tiene dos nombres propios y quizá un sospechoso.
El meollo del asunto nunca ha sido un tema físico o de actitud. Más bien, Diego Valdés decidió convertirse en “Rolfi” Montenegro mientras que Julián Quiñones se volvió Andrés Ibargüen.
Darle la pelota a estos tipos, hoy día, es igual que jugar en la calle cuando niños y patearla a casa del vecino gruñón y perro bravo: balón perdido.
La transformación de las máximas estrellas Azulcremas es digna de un episodio de Expedientes Secretos X. ¿Qué les pasó? ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Cuándo?
El sospechoso es Henry. La presión alta que le caracterizaba viene a la baja. La contundencia… podría ser. No ha tenido tantas chances, pero en el ambiente se siente que su nivel de letalidad ha disminuido.
El dilema está en prescindir del Rolfi e Ibargüen para la final. ¿Alguien se atrevería a sentarles? Seguro que no porque es la eterna encrucijada: si se pierde con ellos en la banca, será culpa del técnico por darles confianza. Si se pierde con ellos en la cancha, será culpa del técnico por necio.
Al americanismo solo le queda una opción: envolverse en la bandera Azulcrema, apoyar a muerte, juegue el que juegue, y esperar lo mejor. Con tantos partidos malos de estos personajes, siempre aumenta la oportunidad de que el próximo sea el bueno, para al menos uno de los dos.
Porque sí, el Americanismo ni siquiera necesita tanto. Tan solo uno de los dos en su mejor nivel y el nuevo título vendrá a casa.
Por lo pronto, a soñar con el doblete en torneos cortos, mismo que nos negó el nefasto del Piojo por largarse con el Tricolor.
EL DATO
Todos los bicampeones de torneos cortos, han conseguido el segundo título con el motor pasando aceite. Esto quiere decir que el América está por el camino correcto.
ESTADÍSTICAS
Solo hubo un equipo en la cancha.
GOLES
1-0 | Israel Reyes (60′): Ganó Igor por aire tras tiro indirecto y como dos cabezazos en el área son gol, Israel Reyes se encargó de mandarla al fondo del arco. ASISTENCIA: Igor Lichnovsky.
TITULARES
LUIS MALAGÓN
Horroroso con los pies y en las salidas. Estuvo a nada de ser protagonista de una tragedia. Están sobrevalorando a este muchacho y se está subiendo al ladrillo. Mucho, mucho cuidado.
ISRAEL REYES
Empezó lamentable a nivel defensivo, tanto en carreras largas como en duelos individuales. Se comió un gol increíble, pero, el fútbol es bueno a veces, y le dio revancha que significa jugar una nueva final.
IGOR LICHNOVSKY
El Trisecto Mayor tiene que buscar un evento desde ya hasta el miércoles porque, después de todo, parece que le sientan bien. Ganó todo por aire, por tierra y se mandó una asistencia. Partidazo.
RAMÓN JUÁREZ
Sólida exhibición, atento ante el escaso trabajo que representaron los rojiblancos que a la ofensiva son inexistentes. Partido sin complicaciones, como nos gusta.
CRISTIAN CALDERÓN
Voluntarioso pero desesperante. Un centro bueno le pedimos y sigue sin llegar. Hubieron dos tiros libres en la recta final, y aunque se paró cerca, no pateó ninguno. ¿Por qué no intentarlo y celebrarles en la jeta? (Salió al 89′ por Luis Fuentes)
JONATHAN DOS SANTOS
Cuando el trabajo consiste en distribuir en lugar de corretear, luce fantástico. Controló el poco ímpetu rojiblanco y se movió por el segundo tercio del campo para ser opción y distribuir. Recibió un planchazo que era de roja, pero ya sabemos que si no hay fractura expuesta, entonces, juegue. (Salió al 89′ por Santiago Naveda)
ÁLVARO FIDALGO
Ofreció una actuación algo más cercana a lo que suelen ser sus presentaciones habituales. Distribuyó, se movió y trasladó la pelota siempre que pudo.
ALEX ZENDEJAS
Incisivo por derecha, donde tiene que jugar toda la vida. Es su hábitat natural. De todos los ofensivos, es el único que tiene gambeta. Es la principal vía de generación de peligro dado que Diego y Julián descansan en el fondo del mar.
JULIÁN QUIÑONES
Salva la nota porque cumplió con la misión de fastidiar a Mozo y no dejarle subir y complicar al Chicote. Al frente es nulidad absoluta. Quiere hacer todor rápido y es atrabancado en exceso. Tiene que serenarse, no todo es correr, correr y correr. (Salió al 93′ por Brian Rodríguez)
DIEGO VALDÉS
Si Valdés fuera un villano de Batman, sería sin duda, Bane. Le desconectaron el cable que le daba su potencia y ahora es un flaquito sin chiste que olvidó cómo se juega al fútbol. Insostenible su presencia. (Salió al 76′ por Richard Sánchez)
HENRY MARTÍN
Tuvo una que parecía para más, pero le salió con dirección al arquero. Esperemos que se haya guardado todos los goles que no ha hecho en la temporada para la final. Entonces habremos de renombrar al túnel Reinoso como el Túnel Henrynator. (Salió al 76′ por Salvador Reyes)
SUSTITUCIONES
RICHARD SÁNCHEZ
El gitano favorito entró enchufado y con ganas. Tomó la pelota y buscó distribuir al frente y no temió en quitarle los dos tiros libres al Chicote. Se asume que está calentando la pierna para otro golazo en la final. (Entró al 76′ por Diego Valdés)
SALVADOR REYES
Escapó y amenazó con ampliar el marcador pero le derribaron fuera del área. Era de roja, pero ya sabemos lo que debe ocurrir para que expulsen a alguien. Lo importante es que está conectado y siempre al servicio del equipo. Queda la impresión que el América ha sido un poco injusto con él. Debería tener más minutos y jugar al ataque que es donde mejor se ve. (Entró al 76′ por Henry Martín)
LUIS FUENTES
Cambio para asegurar el partido y que el Chicote saliera aplaudiendo a su nueva afición. (Entró al 89′ por Cristian Calderón)
SANTIAGO NAVEDA
Entró porque plancharon a Jonathan. (Entró al 89′ por Jonathan Dos Santos)
BRIAN RODRÍGUEZ
Entró para que no se enoje Igor. (Entró al 93′ por Julián Quiñones)
COMENTARIO FINAL
Es normal que el América le gane al Guadalajara.
En la época actual, con la disparidad de planteles, las Águilas están para ganarles nueve de cada diez partidos a los Rojiblancos. Si no pasa, es porque los Azulcremas son desidiosos: se aburren del “pan con lo mismo” y de pronto parece que los jaliscienses pueden competir.
La realidad es innegable. Si América sale a ganar, gana. Feo o bonito, pero gana. Por eso siempre será un dolor de amígdalas perder cualquier punto contra los Chicos del Fierro Viejo.
Lo importante ahora, es que solamente dos partidos separan al Club América de salvar el semestre.
Porque sí: ganar la Liga MX es salvar un semestre que coqueteó con ser épico.
¡Vamos, muchachos!
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