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Hace unos meses, cuando Miguel Herrera tomó nuevamente el cargo de entrenador azulcrema, escribí que “segundas partes nunca fueron buenas”.
La historia azulcrema nos había enseñado que ningún entrenador campeón, en una etapa posterior, podía repetir su éxito. Miguel Herrera tenía todo en su contra, pero en diciembre rompió con el maleficio y se convirtió en el primer entrenador americanista en ser campeón en dos periodos diferentes.
Sin embargo, el título de Liga ganado no debería ser el único parámetro con el que deberíamos medir el éxito o fracaso del Piojo. América tiene algunas cuentas pendientes que le urge saldar, y Miguel y su equipo deberían estar trabajando para ello.
La primera de ellas, la Copa Mx.
La Copa es un torneo que al día de hoy es menospreciado tanto por equipos y afición. Pero esto es por desconocimiento, la Copa es un torneo que existe desde principios de la década de los treinta del siglo pasado, y en su momento sí era algo que presumir. De hecho, las Águilas son el máximo ganador de dicha competencia con 5 títulos (empatado con León y Puebla). Además de ser un torneo que muchos años fue un bálsamo para los Azulcremas, en la época del gran ayuno en la Liga (38 años) y en momentos donde hasta se peleaba por el descenso, las Águilas hacían suyo el torneo.
El Clásico Nacional empieza a surgir en el torneo Copero. Las Chivas que pronto dominarían la liga perdieron la Copa 1953-1954 con América con un momento inolvidable, Eduardo Palmer de portero. El entonces delantero azulcrema fue el héroe y cimentó lo que ahora conocemos como el Clásico de Clásicos.
La Copa sirvió para que las vitrinas americanistas se empezaran a llenar y darle un nombre al equipo, pero, tristemente, desde 1974 no se gana el torneo. Y en esta nueva fase, ya Chivas y Cruz Azul se lo han llevado un par de veces. América no se puede dar el lujo de volver a dejar ir la Copa. Se debe mantener la hegemonía de títulos en esta competencia también. Urge que este semestre esa Copa regrese a casa.
Por otra parte, una competencia en que América busca de hacerse el máximo ganador es el Campeón de Campeones, ahora Chivas tiene 7 títulos, mientras que los de Coapa suman 5. Ya hace un par de años se dejó ir la oportunidad ante Santos, este verano ese trofeo, que no se gana desde 2005, debe también incorporarse a las vitrinas Azulcremas.
A menos que pase una catástrofe en estas semanas, Miguel Herrera seguro volverá para dirigir el Apertura 2019. Por ello, se debe dar la seriedad necesaria al partido único, no es pretemporada, es un partido oficial que te da un título oficial, de eso que el América colecciona y tiene más que el resto de los equipos nacionales.
Continuando, de estar en 2020, el estratega azulcrema tiene pendiente ganar la Liga de Campeones de CONCACAF. Con Matosas y Ambriz se alzó el título recientemente, pero Miguel ha fracasado en 2 intentos. Herrera debe entender que no dirige a Tigres y perder el torneo internacional, donde también se es el máximo ganador, no es algo que se pueda permitir. Tiene que ganarlo, sí o sí.
Finalmente, un trofeo que se disputa desde hace 5 años y no forma parte del currículo Azulcrema es la Supercopa MX. De hecho, se tiene perdida una final ante el Querétaro. Ya sea con Miguel o no, si alguna vez les toca volver a disputar ese partido, América debe enfocarse en ganarlo. Las Águilas nacieron para triunfar en todo, su historia se los exige, esperemos que algún día podamos ver ese trofeo también en Coapa.
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