América eliminado, otra vez, de la Copa Mx en penales

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Triste espectáculo en el Azteca

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Triste espectáculo en el Azteca

Poco se puede decir cuando se hace uno de los mayores ridículos en la historia de la franquicia. Ayer por la noche, las Águilas del América arrastraron el prestigio, la historia, su escudo y sus colores por el fango de la aún maltrecha cancha del Estadio Azteca al caer en tanda de penales contra los Bravos de Juárez por los Octavos de Final de la Copa Mx.

El 11 inicial, conformado por Marchesín, Aguilar, León, Valdez, Álvarez, Rodríguez, Domínguez, Hernández, Martínez, Ibargüen e Insaurralde, fue una clara muestra del interés del entrenador al torneo copero. Y sí, los jugadores, empapados de la mentalidad piojita, se dedicaron a pelotear, menospreciar al rival y burlarse de los 11 mil espectadores que se dieron cita en el Azteca y los miles que lo siguieron por televisión de paga.

Desde el minuto uno fue claro que las Águilas pensaron que los de Juárez morirían de miedo ante el escudo azulcrema, pensaron que bastaba con estar ahí para cumplir el trámite. Pero oh sorpresa, al minuto 15 Bruno Valdez no nos quedó mal y regaló un penal. América se vio abajo en el marcador y muy alejado de alguna idea futbolística. El arquero de Bravos tuvo que aparecer hasta el ’37, y América ya se había salvado anteriormente del 2-0.

En el segundo tiempo dos goles, uno de casualidad, dieron un poco de supuesta normalidad a la situación, pero nuevamente el exceso de confianza, la soberbia azulcrema y los pésimos cambios del entrenador que en vez de buscar el tercero fueron para salvar el resultado, dieron al traste con todo y los Bravos, justamente, se llevaron el empate. Al 85’ una falla infantil de coordinación costó el 2-2.
Luego los penales. Vargas y Renato mal. Ni modo, así es esta instancia. A veces fallas y a veces la metes, se requiere temple y buena técnica. Los nervios pueden luego traicionarte. Grandes del fútbol han sucumbido ante el manchón a 11 pasos de la línea de gol.

Pero no, no hay que confundirnos, no fue culpa de Vargas por fallar el tercer penal como cobardemente lo señaló nuestro flamante entrenador, no, es culpa de la directiva que le sigue apostando a un “estratega” que hace mucho se le acabó el crédito del Clausura 2013. Que, a pesar de tener un título de Liga, ha escrito más páginas negras en la historia Azulcrema que de oro. Primera derrota en toda la historia contra un equipo Centroamericano en el Azteca, Herrera. Primera final de ida y vuelta cerrando en el Azteca perdida, Herrera. Final perdida de la SuperCopaMX, Herrera. Eliminados en Liguilla goleados por Santos y Tigres, Herrera. Primera eliminación por parte de un equipo canadiense, Herrera. Eliminados de la Copa Mx en el Azteca por un equipo de la Liga de Ascenso, Herrera.

Pero no todo recae en Miguelito, hay jugadores que verlos defender nuestros colores es una burla. Martínez, Ibargüen, Valdez, Corona, Aguilar, Domínguez, Insaurralde, Aguilera, Álvarez, etc. No saben qué escudo están portando. Es lo malo que la playera cambie todos los años, hay muchos elementos que les da igual si se ponen la del América verde, amarilla, negra, gris o la de cualquier otro equipo. Que lejos estamos de las enseñanzas de Guillermo Cañedo de la Barcena, de Panchito Hernández, de Emilio Díez, y muchos otros que siempre entendieron lo que era y es el América.

No hay más que decir, América ayer facturó uno de sus más grandes fracasos desde que juega el fútbol. Y no sólo fracasó, si no que hizo el ridículo y se fue eliminado de manera patética. Si no se le gana a Chivas de manera contundente, el lunes Miguel Herrera debería estar sacando sus cosas de Coapa. Sabemos que no va a pasar, pero en un mundo ideal, esa debería ser el resultado de tanto fracaso piojoso.

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